Reghan Breen

Reghan Breen nació treinta y dos años atrás en el seno de una familia purista en Dublín. Hijo de Aeron Breen y Benvy O’Rourke, ambos magos dedicados por completo a la importación y exportación de pociones a alrededor del mundo, empresa heredada cuando el padre de Aeron, Dawayane, murió a consecuencia de una enfermedad cardiaca. Gale, el hermano menor de Aeron, había sido desheredado un par de meses atrás por cuestión ideológicas (se había casado con una hija de muggles y hasta tenían una niña) por eso la empresa pasó por testamento y herencia directamente a su segundo hijo sin particiones con su hermano menor.

Siempre se crió en un ambiente cómodo económicamente y disfrutó de los mejores lujos, bajo el estricta ideología de sus padres, completamente puristas y antimuggles. Tardaron doce años en tener un nuevo hijo desde el nacimiento de Reghan pero por fin nació la primer niña para el matrimonio,  Delaine Breen. Tan solo dos años después vino Ealga Breen y  dos años después de Elga, Eamon Breen el más pequeño de los hermanos. Reghan nunca pudo disfrutar de la unidad fraternal pues cuando su hermana nació, ya hacía dos años que el mayor de los Breen estaba estudiando en Hogwarts y solo veía a su familia en las vacaciones. Nunca estrechó lazos con ninguno de sus hermanos y tal vez por eso siempre prefirió la compañía de un buen libro a la compañía social, creció solitario y criado prácticamente por los elfos domésticos pues sus padres estaban demasiado ocupados con sus negocios más tras la cesión de la empresa tras la muerte de su abuelo.

Fue a Slytherin y en sexto fue nombrado prefecto. Nunca fue fanático del Quidditch pero sí sacó extraordinarios en Pociones e Historia de la Magia así como DCAO. Una vez licenciado en Hogwarts pasó a estudiar Pociones en Brigantia pero al año cambio de carrera empujado por su verdadera vocación y terminó matriculándose en Entrenamiento para aurores. Ya terminada la carrera pasó a trabajar para el departamento de seguridad mágica en el ministerio inglés y fue cuando al poco tiempo se desató la guerra. Mientras sus padres se posicionaron del lado de Voldemort, Reghan se mantuvo en un punto neutral, desafiando a su propia familia pero no estaba dispuesto a perder fuera quien ganase así que se mantuvo en el centro que era la mejor apuesta.

Después de la guerra continuó con su puesto en el ministerio y ayudó a limpiar desde dentro el nombre de su familia para que no quedaran huellas de su servidumbre al señor oscuro. A sus 30 años sigue trabajando como auror.