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Puede que sea una mala decisión
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Puede que sea una mala decisión
[Amy, el islandés (lol) y cualquiera que quiera crashear]
Pudieron tener un encuentro un poco atropellado, pero la verdad es que después de eso las cosas iban mejorando. Ya tenía un par de semanas saliendo con James y todo pintaba de lo mejor, incluso se había acercado más a Amy y era algo que le aliviaba mucho, ya que en un momento pudo pensar que era de esas amigas posesivas y completamente celosas que no permitían ningún tipo de acercamiento que las parejas de sus amigos, pero la verdad era todo lo contrario, se llevaban bien y había alta posibilidad que pronto se convirtiera en una de sus confidentes.
El asunto es que ese día, pues fue algo así como una noche de chicas ya que ambas decidieron ir a dar un paseo todo ameno, primero fueron a una cafetería hablaron de cosas que para los hombres no tenían mucha importancia, pero para ellas era significativo. Y al caer la noche, Whitney le dio una idea, tal vez fuese por el momento o por la repentina confianza que tomó, pero se quiso aventurar a un bar. Whitney no era una chica que se iba a todos los fines de semana de copa en copa, sin embargo tampoco rechazaba si se daba la oportunidad, pero tampoco abusaba, todo era en su justa medida: disfrutaba sin que existiera excesos.
Y así iba la cosa, hasta que tocaron el tema de las relaciones pasadas y bueno, cabía decir que aunque tuvo un noviazgo con Kristján, el hecho que hubiese cambiado y convertido en un idiota bebedor irresponsable le seguía doliendo (por supuesto, ella casi no sabe el pasado de la mayoría de los alumnos ingleses con los que convivía a diario, porque de haberlo sabido tal vez no se lo hubiese tomado tan a pecho). Así que a medida que hablaba y liberaba frustración, tomaba una copa, y luego otra más, más y otra... y así sucesivamente hasta que la rubia había quedado mareada.
- ¿Sabes qué? - Le dijo a la morena ya con ojos chinos y algo desorbitada - ¡Le diré a ese desgraciado todo lo que te acabo de decir! - Bueno, eso si es que lograba recordar todo lo que había dicho.
Y así como un pez escurridizo, se le safó a Amy y terminaron de alguna manera en los dormitorios de los Smertios, específicamente en los dormitorios masculinos de los Smertios. Fue una gran casualidad que los decanos no las hubiese pillado escabullirse por ahí.
- KRIS.... - Había olvidado como pronunciar el nombre - ¡TÚ!, ISLANDÉS, SOLO TE CREES EN DERECHO EN JUGAR CONMIGO... NOSOTRAS... EL MUNDO! POR SER GUAPO.... PUES NOOOOO, NO ES ASÍ... TENEMOS SENTIMIENTOS.... TENEMOS DEBILIDADES - Empezó a gritar de manera tambaleante en los dormitorios, no sabía realmente cual era el dormitorio del islandés - ... TÚ.... TÚ ME MENTISTE - Y bueno ya lo demás era delirante y sin sentido - ... TÚ ... ¿Quién eres tú? -
Pudieron tener un encuentro un poco atropellado, pero la verdad es que después de eso las cosas iban mejorando. Ya tenía un par de semanas saliendo con James y todo pintaba de lo mejor, incluso se había acercado más a Amy y era algo que le aliviaba mucho, ya que en un momento pudo pensar que era de esas amigas posesivas y completamente celosas que no permitían ningún tipo de acercamiento que las parejas de sus amigos, pero la verdad era todo lo contrario, se llevaban bien y había alta posibilidad que pronto se convirtiera en una de sus confidentes.
El asunto es que ese día, pues fue algo así como una noche de chicas ya que ambas decidieron ir a dar un paseo todo ameno, primero fueron a una cafetería hablaron de cosas que para los hombres no tenían mucha importancia, pero para ellas era significativo. Y al caer la noche, Whitney le dio una idea, tal vez fuese por el momento o por la repentina confianza que tomó, pero se quiso aventurar a un bar. Whitney no era una chica que se iba a todos los fines de semana de copa en copa, sin embargo tampoco rechazaba si se daba la oportunidad, pero tampoco abusaba, todo era en su justa medida: disfrutaba sin que existiera excesos.
Y así iba la cosa, hasta que tocaron el tema de las relaciones pasadas y bueno, cabía decir que aunque tuvo un noviazgo con Kristján, el hecho que hubiese cambiado y convertido en un idiota bebedor irresponsable le seguía doliendo (por supuesto, ella casi no sabe el pasado de la mayoría de los alumnos ingleses con los que convivía a diario, porque de haberlo sabido tal vez no se lo hubiese tomado tan a pecho). Así que a medida que hablaba y liberaba frustración, tomaba una copa, y luego otra más, más y otra... y así sucesivamente hasta que la rubia había quedado mareada.
- ¿Sabes qué? - Le dijo a la morena ya con ojos chinos y algo desorbitada - ¡Le diré a ese desgraciado todo lo que te acabo de decir! - Bueno, eso si es que lograba recordar todo lo que había dicho.
Y así como un pez escurridizo, se le safó a Amy y terminaron de alguna manera en los dormitorios de los Smertios, específicamente en los dormitorios masculinos de los Smertios. Fue una gran casualidad que los decanos no las hubiese pillado escabullirse por ahí.
- KRIS.... - Había olvidado como pronunciar el nombre - ¡TÚ!, ISLANDÉS, SOLO TE CREES EN DERECHO EN JUGAR CONMIGO... NOSOTRAS... EL MUNDO! POR SER GUAPO.... PUES NOOOOO, NO ES ASÍ... TENEMOS SENTIMIENTOS.... TENEMOS DEBILIDADES - Empezó a gritar de manera tambaleante en los dormitorios, no sabía realmente cual era el dormitorio del islandés - ... TÚ.... TÚ ME MENTISTE - Y bueno ya lo demás era delirante y sin sentido - ... TÚ ... ¿Quién eres tú? -
Whitney Fenn- Mensajes : 30
Fecha de inscripción : 19/11/2014
Re: Puede que sea una mala decisión
Era su deber como amiga asegurarse de que Whitney no era ninguna fresca que quería aprovecharse de James, así que al principio aquella había sido su única razón para acercarse a la rubia. Pero se había llevado una sorpresa al comprobar que no sólo parecía una chica bastante normal, sino que también era agradable pasar tiempo con ella. Y por eso precisamente aquella tarde de chicas no le había parecido tan mala idea, al menos hasta el momento en que se dio cuenta de que haber bebido más de la cuenta y hablar de su ex había sido mala combinación para ella.
Amy no había bebido tanto, ni de lejos. No por nada ella no tenía historias amargas de amores perdidos para contar y ahogar sus penas. Y hasta le había hecho gracia averiguar que ese exnovio sobre el que hablaba tan amargamente era el mismo islandés con el que había tenido que huir de la enfermería, y con el que había compartido un rato extraño que todavía no estaba del todo segura de como debía clasificar. Sin embargo la cosa dejó de tener gracia cuando Whitney salió corriendo hacía los dormitorios masculinos de Smertios, dispuesta a reclamarle a Kristján sobre a saber que barbaridades. Y como las tres cervezas que había tomado la hacían tener unos reflejos algo más lentos, no alcanzó a detenerla a tiempo y todo lo que pudo hacer es salir corriendo tras ella.
- ¡Whitney! ¡Espera, no debemos...! - dejó la frase a medias cuando tuvo claro que era inútil, que nada de lo que dijera iba a detenerla, así que simplemente la siguió.
Debía tener las piernas más cortas, o debía estar menos en forma, o quién sabía que, porque no logró alcanzarla hasta que ya estaba gritando como loca en medio de los dormitorios. Por suerte parecían desiertos, y es que si el islandés o cualquier otro las sorprendía ahí iba a querer morirse de la vergüenza.
- Soy yo, Amy, ¿recuerdas?. Vamos, tranquilízate. Deberíamos marcharnos. Ya ves que no hay nadie aquí, y podemos meternos en líos con los decanos. - intentó tirar de su brazo en dirección a la puerta, pero la cabeza le daba las vueltas suficientes como para que no tuviera la estabilidad suficiente para obligarla a hacer algún movimiento en contra de su voluntad.
Amy no había bebido tanto, ni de lejos. No por nada ella no tenía historias amargas de amores perdidos para contar y ahogar sus penas. Y hasta le había hecho gracia averiguar que ese exnovio sobre el que hablaba tan amargamente era el mismo islandés con el que había tenido que huir de la enfermería, y con el que había compartido un rato extraño que todavía no estaba del todo segura de como debía clasificar. Sin embargo la cosa dejó de tener gracia cuando Whitney salió corriendo hacía los dormitorios masculinos de Smertios, dispuesta a reclamarle a Kristján sobre a saber que barbaridades. Y como las tres cervezas que había tomado la hacían tener unos reflejos algo más lentos, no alcanzó a detenerla a tiempo y todo lo que pudo hacer es salir corriendo tras ella.
- ¡Whitney! ¡Espera, no debemos...! - dejó la frase a medias cuando tuvo claro que era inútil, que nada de lo que dijera iba a detenerla, así que simplemente la siguió.
Debía tener las piernas más cortas, o debía estar menos en forma, o quién sabía que, porque no logró alcanzarla hasta que ya estaba gritando como loca en medio de los dormitorios. Por suerte parecían desiertos, y es que si el islandés o cualquier otro las sorprendía ahí iba a querer morirse de la vergüenza.
- Soy yo, Amy, ¿recuerdas?. Vamos, tranquilízate. Deberíamos marcharnos. Ya ves que no hay nadie aquí, y podemos meternos en líos con los decanos. - intentó tirar de su brazo en dirección a la puerta, pero la cabeza le daba las vueltas suficientes como para que no tuviera la estabilidad suficiente para obligarla a hacer algún movimiento en contra de su voluntad.
Amy Jackson- Mensajes : 161
Fecha de inscripción : 19/11/2014
Re: Puede que sea una mala decisión
Desde que había terminado la guerra, Kristján no tenía el sueño demasiado profundo, ni pesado. Se despertaba con mucha facilidad ante cualquier cosa. Ese fue el caso de esa noche. Aunque estaba muy cansado y tenía poca disposición a hacer algo más que no fuera descansar los músculos luego de las intensas sesiones de entrenamiento que le ponían y que él mismo se imponía. Por eso cuando escuchó una voz algo fuerte desde afuera, se levantó rápido.
Salió en boxers de la cama y así mismo, por aquello de que casi no sufría de frío, abrió la puerta de su dormitorio para saber de dónde venía tanto alarde. Kristján reconoció de lejos a Whitney, justo cuando otras cabezas de distintos miembros masculinos de la facultad también se asomaban. Extraña cosa que Whitney también iba acompañada de Amy.
-Hey métanse de vuelta a sus habitaciones, ya ya ya, yo me encargo.-Les dijo a sus compañeros, que cualquiera de esos cerdos con gusto se aprovecharía de unas chicas bonitas medio ebrias. Sin pudor por andar en ropa interior, recorrió el pasillo hasta llegar a donde estaban ambas.
-¿Qué pasa? ¿Por qué tanto grito?-No había escuchado las recriminaciones de Whitney hasta donde estaba así que no tenía idea el islandés de que todo eso era por su culpa. Amy parecía la menos afectada por el alcohol así que se dirigió a ella.-¿Qué sucedió, a dónde fueron?-Como gente volvía a asomarse, temió que en cualquier momento esa noticia llegara a oídos de algún decano pero ¿cómo les decía que fueran a su habitación sin que sonara a la petición de un reverendo patán?
-Venga, no pueden estar aquí en el pasillo gritando.-Terminó diciendo e intentó tomar a Whitney por la espalda para guiarla.
Salió en boxers de la cama y así mismo, por aquello de que casi no sufría de frío, abrió la puerta de su dormitorio para saber de dónde venía tanto alarde. Kristján reconoció de lejos a Whitney, justo cuando otras cabezas de distintos miembros masculinos de la facultad también se asomaban. Extraña cosa que Whitney también iba acompañada de Amy.
-Hey métanse de vuelta a sus habitaciones, ya ya ya, yo me encargo.-Les dijo a sus compañeros, que cualquiera de esos cerdos con gusto se aprovecharía de unas chicas bonitas medio ebrias. Sin pudor por andar en ropa interior, recorrió el pasillo hasta llegar a donde estaban ambas.
-¿Qué pasa? ¿Por qué tanto grito?-No había escuchado las recriminaciones de Whitney hasta donde estaba así que no tenía idea el islandés de que todo eso era por su culpa. Amy parecía la menos afectada por el alcohol así que se dirigió a ella.-¿Qué sucedió, a dónde fueron?-Como gente volvía a asomarse, temió que en cualquier momento esa noticia llegara a oídos de algún decano pero ¿cómo les decía que fueran a su habitación sin que sonara a la petición de un reverendo patán?
-Venga, no pueden estar aquí en el pasillo gritando.-Terminó diciendo e intentó tomar a Whitney por la espalda para guiarla.
Kristján Sveinsson- Mensajes : 249
Fecha de inscripción : 19/11/2014
Re: Puede que sea una mala decisión
[Voy a dar por hecho de que ya conozco a Kris por el quidditch y yadda yadda yadda, luego acomodamos específicos ]
Abbygail era de sueño ligero. No sufría de insomnios de ninguna clase y podía dormir sus horas sin mayor inconveniene, pero no se necesitaba de mucho para despertarla. El inconveniente mayor resultaba que, de despertar abruptamente, siempre lo hacía de mal humor. No fue sorpresa que, al momento en que el escándalo que se armaba en el pabellón de los varones se armó, fue de las primeras en abrir los ojos. Las habitaciones no estaban tan retiradas entre sí, y aquellas paredes eran delgadas como papel. Para bien o para mal, siempre se estaba al tanto cuando el vecino había tenido suerte o no por la noche.
Estando de muy, muy mal humor, tal cual salió de la cama tomó su varita de la mesa de noche y descalza salió de su dormitorio, El cabello, recogido en un moño alborotado, ya le destellaba de color plata. Desafortunadamente, por muy hermoso que se viera aquel efecto, nunca era buena señal cuando sucedía.
Que encontrar el centro del escándalo no fue difícil, solo había que seguir los gritos. Kristján (en calzones, de lo que no se iba a quejar) y dos chicas de otras facultades, que alcanzaba a reconocer de vista, pero ni sabía sus nombres. Y si los sabía, pues mala suerte, porque el hecho de que la despertaran con esos circos hacía que detalles como andar recordando nombres y rostros le importaran muy poco.
- ¿Es tu club de animadoras? - Preguntó con los ojos entrecerrados, concentrándose principalmente en la rubia, que era quien venía en peor estado venía. - Te podemos regresar la sobriedad a base de Aquamentis... - La miró con cierto desdén a ella, luego a la morena que la acompañaba y parecía intentando controlarla, y luego a su compañero. No le pasó por alto que una nueva puerta se abría y de ella se asomaba Robertson, buen golpeador pero indiscutiblemente insoportable. Abbygail le miró y haciendo uso de todo su encanto, valiéndose de una sonrisa un tanto cínica pero aún así cautivadora, suspiró cansada. - ¿Te regresas a dormir? No hay nada que hacer aquí. - Solo esperaba (y más valía) que Sveinsson controlara a su séquito pronto.
Abbygail era de sueño ligero. No sufría de insomnios de ninguna clase y podía dormir sus horas sin mayor inconveniene, pero no se necesitaba de mucho para despertarla. El inconveniente mayor resultaba que, de despertar abruptamente, siempre lo hacía de mal humor. No fue sorpresa que, al momento en que el escándalo que se armaba en el pabellón de los varones se armó, fue de las primeras en abrir los ojos. Las habitaciones no estaban tan retiradas entre sí, y aquellas paredes eran delgadas como papel. Para bien o para mal, siempre se estaba al tanto cuando el vecino había tenido suerte o no por la noche.
Estando de muy, muy mal humor, tal cual salió de la cama tomó su varita de la mesa de noche y descalza salió de su dormitorio, El cabello, recogido en un moño alborotado, ya le destellaba de color plata. Desafortunadamente, por muy hermoso que se viera aquel efecto, nunca era buena señal cuando sucedía.
Que encontrar el centro del escándalo no fue difícil, solo había que seguir los gritos. Kristján (en calzones, de lo que no se iba a quejar) y dos chicas de otras facultades, que alcanzaba a reconocer de vista, pero ni sabía sus nombres. Y si los sabía, pues mala suerte, porque el hecho de que la despertaran con esos circos hacía que detalles como andar recordando nombres y rostros le importaran muy poco.
- ¿Es tu club de animadoras? - Preguntó con los ojos entrecerrados, concentrándose principalmente en la rubia, que era quien venía en peor estado venía. - Te podemos regresar la sobriedad a base de Aquamentis... - La miró con cierto desdén a ella, luego a la morena que la acompañaba y parecía intentando controlarla, y luego a su compañero. No le pasó por alto que una nueva puerta se abría y de ella se asomaba Robertson, buen golpeador pero indiscutiblemente insoportable. Abbygail le miró y haciendo uso de todo su encanto, valiéndose de una sonrisa un tanto cínica pero aún así cautivadora, suspiró cansada. - ¿Te regresas a dormir? No hay nada que hacer aquí. - Solo esperaba (y más valía) que Sveinsson controlara a su séquito pronto.
Abbygail Ettinger- Mensajes : 11
Fecha de inscripción : 01/12/2014
Re: Puede que sea una mala decisión
[Disculpen la requete demora, vida y trabajo asfixiante para su servidora, pero ya estoy de vacaciones, así que ya me verán más seguido por aquí ^^]
_
De haber estado consciente, esa parte de la historia de su vida no existiera en primer lugar ya que Whitney realmente no era de esas que hacían escándalos porque sí. Sin embargo, los efectos del alcohol la hicieron actuar demás y no solo eso, sino también intentar cerrar abruptamente ese capítulo que sentía inconcluso desde que se había separado con Kristján, porque desde algún tiempo ganas de comunicarse con él en buen plan y charlar tranquila y civilizadamente para que ella por lo menos pudiera quedar tranquila con su alma.... pero bueno, no todo en la vida se podía obtener.
De pronto Amy, la quería apartar pero su estado de ebriedad no la dejaba entender del todo el por qué, si para ella en ese momento era un simple e inofensivo reclamo y más nada, es más hasta pensaba que era temprano... obviamente las cosas eran totalmente diferentes desde la perspectiva externa. De hecho, tampoco le prestó mucha atención a que poco a poco curiosos empezaban a asomar sus cabezas por las puertas. Entonces, el susodicho salió, en calzones, pero salió. Tampoco le prestó mucha atención al hecho que estaba en paños menores, cosa que cualquier chica hubiera disfrutado o sentido pecaminosa en ese momento, sin embargo, ella estaba enfocada en su reclamo y más nada.
- TÚ - Se refirió al islandés y dio tres pasos hacia adelante (que pensó que lo había hecho con firmeza y templanza, pero solo consiguió tambalearse un poco) - ¿POR QUÉ LO HICISTE?.... ¿?POR QUÉ?? - hizo una pausa ya que un hipo se le salió de la nada - CON UN SIMPLE ADIÓS ERA SUFICIENTE, PERO NO!! TE FUISTE POR...PORQUE SI - Apretó el puño y siguió tambaleandose - ¿Acaso fui tan poca cosa para ti? - Pero de pronto su inspiración se vio cortada con la aparición de otra chica... brillante, en realidad no diferenciaba bien si era veela o que el alcohol se le fue por las nubes - ¡Dormiré cuando se disculpe por todo lo que me hizo! - En realidad Kristján no le había hecho gran cosa, solo se marchó y ya, las personas tienen derecho a hacerlo y la parte consciente de ella lo entendía, sin embargo por otro lado, la no puntualidad de no haberlo dicho como tal, de que solo las cosas continuaran sin más le generó una pequeña molestia desde siempre que con el alcohol lo multiplicó por mil.
Acto seguido empezó a llorar, como si ya no estuviera lo suficiente borracha. Menos mal que no tenía maquillaje en los ojos más que un simple rímel para levantar sus pestañas que no ocasionaron que nada se le corrieran y se viera más patética. Gracias a dios existía maquillaje a prueba de agua.
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De haber estado consciente, esa parte de la historia de su vida no existiera en primer lugar ya que Whitney realmente no era de esas que hacían escándalos porque sí. Sin embargo, los efectos del alcohol la hicieron actuar demás y no solo eso, sino también intentar cerrar abruptamente ese capítulo que sentía inconcluso desde que se había separado con Kristján, porque desde algún tiempo ganas de comunicarse con él en buen plan y charlar tranquila y civilizadamente para que ella por lo menos pudiera quedar tranquila con su alma.... pero bueno, no todo en la vida se podía obtener.
De pronto Amy, la quería apartar pero su estado de ebriedad no la dejaba entender del todo el por qué, si para ella en ese momento era un simple e inofensivo reclamo y más nada, es más hasta pensaba que era temprano... obviamente las cosas eran totalmente diferentes desde la perspectiva externa. De hecho, tampoco le prestó mucha atención a que poco a poco curiosos empezaban a asomar sus cabezas por las puertas. Entonces, el susodicho salió, en calzones, pero salió. Tampoco le prestó mucha atención al hecho que estaba en paños menores, cosa que cualquier chica hubiera disfrutado o sentido pecaminosa en ese momento, sin embargo, ella estaba enfocada en su reclamo y más nada.
- TÚ - Se refirió al islandés y dio tres pasos hacia adelante (que pensó que lo había hecho con firmeza y templanza, pero solo consiguió tambalearse un poco) - ¿POR QUÉ LO HICISTE?.... ¿?POR QUÉ?? - hizo una pausa ya que un hipo se le salió de la nada - CON UN SIMPLE ADIÓS ERA SUFICIENTE, PERO NO!! TE FUISTE POR...PORQUE SI - Apretó el puño y siguió tambaleandose - ¿Acaso fui tan poca cosa para ti? - Pero de pronto su inspiración se vio cortada con la aparición de otra chica... brillante, en realidad no diferenciaba bien si era veela o que el alcohol se le fue por las nubes - ¡Dormiré cuando se disculpe por todo lo que me hizo! - En realidad Kristján no le había hecho gran cosa, solo se marchó y ya, las personas tienen derecho a hacerlo y la parte consciente de ella lo entendía, sin embargo por otro lado, la no puntualidad de no haberlo dicho como tal, de que solo las cosas continuaran sin más le generó una pequeña molestia desde siempre que con el alcohol lo multiplicó por mil.
Acto seguido empezó a llorar, como si ya no estuviera lo suficiente borracha. Menos mal que no tenía maquillaje en los ojos más que un simple rímel para levantar sus pestañas que no ocasionaron que nada se le corrieran y se viera más patética. Gracias a dios existía maquillaje a prueba de agua.
Whitney Fenn- Mensajes : 30
Fecha de inscripción : 19/11/2014
Re: Puede que sea una mala decisión
Bueno pues, acababa de suceder lo que había querido evitar por todos los medios, y desde luego no estaba suficientemente borracha, ni de forma remota, para que no le importara que todo Smertios saliera a verlas montando su espectáculo (aunque técnicamente era Whitney la del espectáculo y ella la que intentaba convencerla de que dejara de gritar). Y evidentemente la cosa empeoró hasta extremos insospechados cuando apareció Kristján, sin más ropa que sus calzones. Y aunque no había bebido para perder el sentido del ridículo y deseaba con todas sus fuerzas desaparecerse hacia su dormitorio y esconderse debajo de las mantas hasta el año siguiente, si que había bebido lo suficiente para no darse cuenta de que era completamente inadecuado quedarse viendo al islandés con la boca ligeramente abierta, repasándolo de arriba abajo.
- ¿Que haces sin ropa? - incluso preguntó, olvidándose por completo del porqué estaba en Smertios y del drama que estaba organizando su amiga, justo a su lado.
Por supuesto aquel momento de lapsus fue aprovechado por Whitney para aumentar el volumen de sus gritos, seguramente animada por la presencia de Kris. Casi de inmediato la tomó del brazo de nuevo para intentar silenciarla.
- Estábamos tomando unas copas. Una salida de chicas. Inocente. Ni siquiera me di cuenta de que bebía tanto. Empezamos a hablar de chicos, me contó que habíais salido juntos y… No sé, de ahí empezó a gritar incoherencias en tu contra. Intenté detenerla. Mi intención era llevarla a su cama, no terminar en tu facultad… – dijo, intentando que no se notara que las palabras salían más atropelladas de lo normal. Dio un vistazo alrededor y todas aquellas miradas fijas en ellos no la ayudó a tranquilizarse – ¿Tienes una capa de invisibilidad? La necesito desesperadamente. – porque ser invisible se le antojaba muy apetecible en esos momentos.
Y por si no fuera suficientemente malo, una de sus espectadoras se acercó, ni siquiera sabía si para ayudar a silenciar los gritos de Whitney, a ver el show más de cerca o a qué exactamente. Parpadeó varias veces mirándola antes de decidir que definitivamente debía ser semiveela: rubia y absurdamente bonita.
- Esta universidad cada vez tiene más semiveelas. – ni siquiera se dio cuenta que lo había dicho en voz alta. Eran sus amargos pensamientos, pues las semiveelas siempre la habían puesto nerviosa. Había perdido más de un chico por su culpa, porque todos las preferían, y el último ejemplo de eso (el más reciente y el que más dolía) era el de Darren, que había sido el protagonista de su última relación formal, que había decidido que una semiveela que ni siquiera recordaba como se llamaba era más interesada que su novia. El pensamiento hizo que frunciera el ceño y quién sabe si se hubiera continuado perdiendo por aquellos pensamientos de no ser porque Kristján parecía conocer algún lugar para que estuvieran sin todas aquellas miradas a su alrededor, y desde luego que le parecía una buena idea, así que intentó ayudar para que Whitney les siguiera. Y fue entonces cuando empezó a llorar. – ¿Pero que le hiciste? – preguntó mirando al chico con expresión sorprendida, porque realmente cada vez entendía menos a que venía aquel drama. ¿Tan trágico había sido su final como pareja?
- ¿Que haces sin ropa? - incluso preguntó, olvidándose por completo del porqué estaba en Smertios y del drama que estaba organizando su amiga, justo a su lado.
Por supuesto aquel momento de lapsus fue aprovechado por Whitney para aumentar el volumen de sus gritos, seguramente animada por la presencia de Kris. Casi de inmediato la tomó del brazo de nuevo para intentar silenciarla.
- Estábamos tomando unas copas. Una salida de chicas. Inocente. Ni siquiera me di cuenta de que bebía tanto. Empezamos a hablar de chicos, me contó que habíais salido juntos y… No sé, de ahí empezó a gritar incoherencias en tu contra. Intenté detenerla. Mi intención era llevarla a su cama, no terminar en tu facultad… – dijo, intentando que no se notara que las palabras salían más atropelladas de lo normal. Dio un vistazo alrededor y todas aquellas miradas fijas en ellos no la ayudó a tranquilizarse – ¿Tienes una capa de invisibilidad? La necesito desesperadamente. – porque ser invisible se le antojaba muy apetecible en esos momentos.
Y por si no fuera suficientemente malo, una de sus espectadoras se acercó, ni siquiera sabía si para ayudar a silenciar los gritos de Whitney, a ver el show más de cerca o a qué exactamente. Parpadeó varias veces mirándola antes de decidir que definitivamente debía ser semiveela: rubia y absurdamente bonita.
- Esta universidad cada vez tiene más semiveelas. – ni siquiera se dio cuenta que lo había dicho en voz alta. Eran sus amargos pensamientos, pues las semiveelas siempre la habían puesto nerviosa. Había perdido más de un chico por su culpa, porque todos las preferían, y el último ejemplo de eso (el más reciente y el que más dolía) era el de Darren, que había sido el protagonista de su última relación formal, que había decidido que una semiveela que ni siquiera recordaba como se llamaba era más interesada que su novia. El pensamiento hizo que frunciera el ceño y quién sabe si se hubiera continuado perdiendo por aquellos pensamientos de no ser porque Kristján parecía conocer algún lugar para que estuvieran sin todas aquellas miradas a su alrededor, y desde luego que le parecía una buena idea, así que intentó ayudar para que Whitney les siguiera. Y fue entonces cuando empezó a llorar. – ¿Pero que le hiciste? – preguntó mirando al chico con expresión sorprendida, porque realmente cada vez entendía menos a que venía aquel drama. ¿Tan trágico había sido su final como pareja?
Amy Jackson- Mensajes : 161
Fecha de inscripción : 19/11/2014
Re: Puede que sea una mala decisión
Kristján le agradeció con la mirada a Abby que saliera, pero al mismo tiempo se sintió más presionado por toda la escena ahora que estaba bajo su “supervisión”. La miró dos segundos fijamente antes de que Whitney empezara a gritar y a tambalearse. Se aguantó las ganas de contestarle que no había sido él quien se había ido y que si lo había hecho había sido porque ella así lo había querido, que era él quien había sido poca cosa para ella con sus borracheras y su incapacidad de establecerse emocionalmente.
-¿Lo que yo te hice….?-Preguntó incrédulo y la sostuvo por los hombros. Gracias al cielo que él no estaba borracho porque sino la escena hubiera sido completamente diferente. Se contrarió al verla llorar porque no sabía cómo manejar esas cosas. Por suerte no era la primera vez que una mujer le gritaba en los pasillos y si no se casaba con una sumisa islandesa pronto, seguro no sería la última.
-…¿qué?-Preguntó bajita y estúpidamente como respuesta a la misma pregunta de Amy sobre que hacía sin ropa. Bajó la vista para verse a él mismo y luego encogió los hombros sin contestar hasta que Amy comenzó a contarle la razón de que Whitney estuviera así. Volvió a mirar a la chica rubia y luego le echó un vistazo a Abby.
-No, no tengo capas de invisibilidad.-Amy tampoco lucía muy bien y ver a Whitney llorar no ayudaba a que pensara rápido. -¿Qué le hice? Entrar a rehabilitación por ella, eso hice.-Musitó molestó mientras tomaba a Whitney por la cintura y trataba de llevarla hasta su habitación. Miró a Abby y, aunque se sintió miserable, tuvo que pedirle un favor, ¿qué había en el mundo más jodido que pedirle un favor en un lío de faldas a la chica por la que habías empezado a ser un imbécil en primer lugar? .-¿Me ayudas con Amy? Hay que darles leche, ¿tienes leche?-Que mal.
-Whitney, podemos hablar, en privado. ¿Sí? Arreglaremos eso.-Le aseguró y trataba de sonar tranquilo y en control mientras la guiaba.
-¿Lo que yo te hice….?-Preguntó incrédulo y la sostuvo por los hombros. Gracias al cielo que él no estaba borracho porque sino la escena hubiera sido completamente diferente. Se contrarió al verla llorar porque no sabía cómo manejar esas cosas. Por suerte no era la primera vez que una mujer le gritaba en los pasillos y si no se casaba con una sumisa islandesa pronto, seguro no sería la última.
-…¿qué?-Preguntó bajita y estúpidamente como respuesta a la misma pregunta de Amy sobre que hacía sin ropa. Bajó la vista para verse a él mismo y luego encogió los hombros sin contestar hasta que Amy comenzó a contarle la razón de que Whitney estuviera así. Volvió a mirar a la chica rubia y luego le echó un vistazo a Abby.
-No, no tengo capas de invisibilidad.-Amy tampoco lucía muy bien y ver a Whitney llorar no ayudaba a que pensara rápido. -¿Qué le hice? Entrar a rehabilitación por ella, eso hice.-Musitó molestó mientras tomaba a Whitney por la cintura y trataba de llevarla hasta su habitación. Miró a Abby y, aunque se sintió miserable, tuvo que pedirle un favor, ¿qué había en el mundo más jodido que pedirle un favor en un lío de faldas a la chica por la que habías empezado a ser un imbécil en primer lugar? .-¿Me ayudas con Amy? Hay que darles leche, ¿tienes leche?-Que mal.
-Whitney, podemos hablar, en privado. ¿Sí? Arreglaremos eso.-Le aseguró y trataba de sonar tranquilo y en control mientras la guiaba.
Kristján Sveinsson- Mensajes : 249
Fecha de inscripción : 19/11/2014
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