Sandra Larson

Sandra es la única hija de Abbigail Capshaw, una joven bruja de sangre pura que terminó por enamorarse de Leon Larson, músico muggle quien, por más que intentó alcanzar el estrellato con su banda, jamás pudo conseguir su meta por completo. Aunque Leon y su banda gozaban de algo de popularidad en la escena local, al quedar Abbigail embarazada con apenas 18 años le obligó a compaginar la música con cuanto empleo le estuviera al alcance. El pánico de enfrentarse a la maternidad ella solo teniendo apenas 19 años fue lo que le hizo confesarle a Leon tal vez el rasgo más importante de su identidad y que había ocultado hasta el momento: que era una hechicera.

Asimilar ese hecho no fue nada fácil, pero frente a las evidencias no había mucha objeción que pudiera poner. Con todo y el golpe tan tremendo que esa verdad suponía para todo en lo que Leon creía, quería demasiado a Abbigail como para alejarse de ella y su hijo. Y fue así como la joven bruja fue a vivir con él al Edimburgo muggle.

Leon tomaba cuanto trabajo encontraba para poder mantener bien a su familia que se expandía y Abbigail se trataba de adaptar a su nueva vida tan rápido como le fuera posible. Sandra nació en un hogar en el que el dinero no era algo que sobrara y la relación de sus padres siempre fue voluble debido a su inmadurez, pero por lo que puede ver en fotografías los años que estuvieron los tres juntos fueron felices.

Leon y Abbigail estuvieron juntos cinco años aunque nunca se casaron, cosa que parecía molestar más a los padres de ella que el que su hierno fuera muggle sin nada de estabilidad económica. Desafortunadamente la vida de Abbigail terminó pronto debido a un accidente cuando conducía un coche que, irónicamente, había estado tan orgullosa de aprender a usar. De su madre Sandra recuerda poco o casi nada, pero sabe que físicamente se parece mucho a ella.

Leon se convirtió entonces en padre soltero, haciendo lo que podía por sostener y criar a Sandra aún y cuando muchas veces su comportamiento sacaba de quicio a la familia Capshaw. Nunca trató de impedir que los hechiceros tuvieran contacto con la niña, aunque debido a su acercamiento con el mundo mágico es un supersiticioso a grado enfermizo, tanto que no pone un pie fuera de casa en viernes treces ni puede tener gatos negros cerca, y es que si la mujer que le había dado una hija era bruja, el mantenerse escéptico era un lujo que consideraba ya no podía darse.

Sandra creció escuchando la música de su padre, llevándole cervezas cuando se lo pedía y conociéndole muchas novias a lo largo de los años, yendo al colegio muggle y viendo a sus abuelos brujos un par de veces al mes. Por lo mismo el que diera señales de magia con 8 años de edad no fue ninguna sorpresa para Leon y sí un verdadero orgullo para sus abuelos. A los 11 años recibió su carta de aceptación a Hogwarts y fue sorteada para la casa Hufflepuff. Aunque dentro del aula de clases sus maestros le han considerado siempre una niña tranquila y que no hace alboroto, cuando no había adultos a su alrededor siempre andaba metiéndose en problemas: al principio inocentes, lo propio de una niña de 11 años, después ya no tanto conforme fue creciendo y trayendo de contrabando licor y algunas drogas de casa de su padre. No se ha avergonzado nunca de sus orígenes y defiende a su padre ante todo de quien le llame vago sin oficio o a su madre una traidora. Aunque se involucró poco en la guerra por temor a represalías contra su padre o sus abuelos ya ancianos, más de una vez se unió a sus compañeros dentro del colegio para tratar de defenderse.

Al terminar sus estudios ingresó a Brigantia a la carrera de Herbología, dejándola trunca en su quinto semestre. En parte porque el ambiente universitario no era uno con el que terminara de sentirse identificada, en parte para centrarse en trabajar y apoyar a su padre cuya espalda ya no aguanta los trabajos como albañil que aguantaba antes, así como también para apoyar a su novio Dave Rayder en sus aspiraciones musicales y con los problemas económicos de su propia familia. Actualmente trabaja en Honeydukes mientras se plantea el retomar o no sus estudios donde los dejó.