Business Time

Información Básica

Simon Miller

Londres, Inglaterra

23 años

Sangre Sucia.


-Es un sujeto bastante violento con cierta tendencia a menospreciar racialmente a cualquier persona que cumpla con las características necesarias para caer en los estereotipos, agregándose a estos los propios puristas, a quienes por supuesto también considera inferiores por su poca capacidad al trabajo físico y por esa estupidez que les hace creer lo contrario.

-No es un estudiante. Actualmente es traficante de drogas con una carrera prometedora en el mundo muggle. Busca ampliar los horizontes de su negocio en Brigantia, en donde tiene los suficientes contactos como para comenzar con el pie derecho.

-Más que ser aficionado al deporte, es un ferviente seguidor del Chelsea F.C. Es cabecilla de los 'Chelsea Shed Boys' (A los que le gusta llamarles 'Headhunters')

-Presenta claros signos de comportamiento sociópata, y prácticamente busca cualquier pretexto para partirle la cara a todo aquel que le caiga medianamente mal.

-A pesar de las anteriores características, su educación familiar le hace ser muy apegado a ciertos parámetros sociales, como por ejemplo el hecho exigir un comportamiento al momento de comer, o el trato que se le pueda dar a una mujer que lo merezca. Dicho esto, cualquiera que viole esos detalles básicos se convierte en un objetivo primario.

BUSCO!!

Amigos: Sinceramente, dudo que muchos puedan serlo, pero si no eres extranjero, o gitano, o judío, o negro, o purista; le vas al Chelsea FC (o a ninguno) y no te crees superior a mí; es probable que se pueda dar algo parecido a la amistad.

Colegas de negocio: Nos conocimos en Hogwarts, y te tengo la suficiente confianza como para que seas parte de la expansión que estoy iniciando dentro de la Universidad.

Enemigos: Si eres extranjero, o judío, o gitano, o negro, o purista, ladrón, soplón o punk, será mejor que ni te le acerques si no te quieres ganar la tunda de tu vida.

Amores: Aquí puede haber mucha variedad... desde simple atracción hasta noviazgo de no demasiada duración.

Mira tonto Miller

Al principio de los tiempos éramos rivales, ya sabes, por el Gryffindor vs Slytherin inmemorial, pero eran cosas inocentes. Luego tuvimos una dura temporada en la que yo te odiaba muchísimo porque eras un idiota racista de porquería, y no me explicaba cómo podías ser así si en el mundo mágico sufrías de ese racismo idiota de los puristas. Pensaba que ibas a cambiar por milagro, pero eso nunca pasó, al menos no hasta que la guerra se puso realmente horrible y entre la depresión y el miedo terminamos acostándonos mil veces ¬¬ y tú empezaste a luchar con nosotros. Y todo bien. Cuando te fuiste a hacer negocios al mundo muggle la verdad no te busqué, aunque como te casaste con una Crawford supuse que te habías enderezado, igual Syd me contaba que tenías un negocio de tráfico de drogas, pero no me dijo que tu matrimonio fuera a pique por obvia razones. Tampoco traté de contactarte mediante él ni nada. No sé, cero. Pero ya, siendo honestos, cuando vuelva a verte me pondré loca de feliz, aunque igual la felicidad no me durará mucho si me entero que no has enderezado tus ideales asquerosos para nada ò_ó y te odiaré.

Igual fue una buena época aquella... :B

Hmmm, vengo con un par de propuestas. Como eres de la misma edad y casa que mi hermano Jude supongo que se conocieron y fueron compañeros de quidditch y demás, compartían intereses futbolísticos y creo que se respetaban aunque no llegaran a ser muy cercanos. Yo por mi lado, era un blanco fácil, pero creo que en Hogwarts no fuiste especialmente violento contra mi por, no sé, entre mi hermano y mi invisibilidad.

Los problemas llegaron después, en el mundo muggle. No muchos lo saben pero soy homosexual, y puedo ser ligeramente más abierto al respecto cuando no estoy entre magos. Como tú sueles estar más entre muggles también, creo que me identificaste como tal en algún club donde movías mercancía. Creo que desde entonces temo por mi vida, aunque no me queda muy claro si sabes que soy gay o no lo sabes. Una vez te vi de lejos cuando el Chelsea fue de visitante al Villa Park (yo soy hincha del Aston Villa) y rogué por que no me reconocieras. Ah... y con eso basta. Miedo absoluto por mi parte.

De niños, cuando recién entraste a Hogwarts, nos llevamos muy bien. Yo era un año mayor que tú pero todo se dio bien cuando descubrimos mutua afición por el quidditch y mutua afición por el Chelsea. Se puede decir eso nos unió. Pasamos mucho tiempo libre discutiendo sobre fútbol pero mi amor por los blues nunca llegó a tanto como para convertirme en un aspirante a hooligan como tú, de hecho ni siquiera fuimos a partidos juntos. Tu vena racista me hizo separarme de ti cuando empezó a aflorar más y hasta estuve muy en desacuerdo con Frances respecto a meterte en nuetras filas. Como mago y como tipo que sabe pelear te respeto, pero nuestra amistad jamás pudo crecer. De vez en cuando también te veo en el Stamford Bridge, alguna vez tú llevaste a tu hijo y yo llevaba al mío y compartimos el momento por los viejos tiempos, pero no se ha vuelto a repetir, aunque soy muy amigo de tu esposa, seguro piensas lo peor.

Yo también detesto a los judíos, a los negros (más cuando tienes un par de medios hermanos de ese color que se meten a la lista por la herencia familiar) a los franceses y a los alemanes por creerse tanto, y a los españoles y portugueses casi que no porque simplemente ni cuentan... a los puristas... a los católicos ortodoxos, a la gente de campo, rurales pobres sin dientes.... a los yanquis... a los nuevos ricos! ... etc etc etc.... Pero no voy por ahí haciendo alarde de eso. Simplemente no te cruzas con ellos y ya... Te evitas problemas y disgustos.

Al principio de Hogwarts sonreía por tus comentarios y formas, y tu me parecías super interesante. Alguien como uno en ese mundo tan lleno de cualquier cosa... Luego me sosegué un poco, porque al fin y al cabo el colegio es una mezcolanza terrible, donde si te pones a investigar nadie es como uno, (ni tu que eres sangre sucia) y .... hay que convivir.... Y a diferencia de ti, yo algo maduré y no toda diferencia es para mal. Exceptuando a los judíos, esos no tienen arreglo, y cambiando a los sangresucia por los puristas...

Como fuera, de eso mil años. Después vino lo de las drogas, y yo en mi ingenuidad pensaba que de eso adentro del castillo nada. Claro me olvidaba que tu eras sangre sucia, como tantos otros, que tenían sus llegadas más rápidas a esas sustancias. Así que tuvimos nuestras relaciones comerciales, que se cortaron cuando yo me acopié de valor y empecé a arreglármelas por mi misma. También porque presencié un episodio muy violento en el que estuviste de protagonista y eso me dio terror. Literal... Y eras amigo de la harpía de Frances y eso también da terror.

De todo eso muchos siglos.... Yo ya dejé las drogas (?) y la guerra pasó, así que para mi, ni cuentas como carne de cañón para poner en primera fila de una emboscada.

Bueno, pues voy a tirar del hilo del fútbol para conocerte, porque resulta que mi padre también es fanático del Chelsea y yo nada más que para joder me aficioné al Arsenal, así que nos conocimos en uno de esos partidos Chelsea vs Arsenal al que fui con mi padre, completamente vestida de rojo.
En Hogwarts casi no nos habíamos prestado atención, pero en ese partido... bueno, fue imposible no pasarnos el partido gritándonos histerias el uno al otro, y eso creó un precedente. Y aunque sólo nos encontrábamos en ese tipo de partidos, era divertido hacer apuestas arriesgadas y esas cosas. Nada más a parte de algo de tensión sexual y algún beso furioso, porque mi padre siempre andaba cerca, y porque yo acababa de dejarlo con mi primer novio y todavía recogía los pedazos de mi corazón roto.

Luego yo me fui a mi año sabático en Rumania y ahí quedó la cosa, no me quedó mucho tiempo para el fútbol muggle. Si ahora andas haciendo negocios en Brigantia pues supongo que volveremos a vernos y a ver qué.

No sé, ¿que te parece? ¿Eso me deja en odio? ¿En conocidos en buenos términos? Tu dirás (sigo aficionada al Arsenal, me temo jajaja)

Frances: Siempre me causó gracia el “odio” que me profesabas por mis ideas respecto a la superioridad caucásica. No sé, pensaba que lo que realmente pasaba era que me deseabas sexualmente con todas tus fuerzas y la única forma que tenías para ocultarlo era siendo una harpía. Vino la guerra y… de alguna forma me terminaste dando la razón, porque nos acostamos muchas veces antes de que comenzaras tu relación con Alechinsky. Fuimos camaradas de guerra, luche a tu lado y todo eso (yo no estaba tan comprometido como ustedes, pero me gustaba ver a los puristas sangrar); y cuando al fin terminó la guerra, me fui a vivir con Cherry y nos distanciamos.
No sé cariño, tengo muy buenos recuerdos de ti (si sabes a lo que me refiero). Tu nuevo odio me va a romper el corazón, jaja.

Kit: Para ser honesto, al principio no te ubiqué en lo absoluto. En el pasado escuché algunas veces acerca de ti por tu hermano Jude que hablaba de su hermanito listo y tal, pero nada más. La cosa interesante vino en ese club del que hablas, en donde yo movía mi mercancía. Verte en esa clase de lugares, sabiendo que eras hermano de Jude, me causo más de una reacción. La verdad es que me dieron muchas ganas de echarle un telefonazo al viejo Jude y preguntarle si sabía de su pequeño hermano maricón, pero no lo hice, ni tampoco te abordé a golpes como un maniaco psicópata. Sé que me viste, y con eso me basta para disfrutar de tu sufrimiento, porque tu miedo huele a kilómetros y eso me basta para un buen rato.

David: Eras prospecto de un buen colega. Ya sabes, con la fuerza necesaria para despedazar a quien sea, con buena onda, con actitud, me soportabas, le vas al Chelsea, y por si fuera poco, eras amigo de mi ex esposa. Como sea, fue una pena que de la noche a la mañana te amariconaras, y que incluso hablaras en mi contra respecto a lo de unirme a su club de panteras negras. No lo sé hombre, aun espero que te retractes por toda la mierda y te disculpes de hombre a hombre, pero poco a poco me he ido convenciendo de que es mucho pedir.

Jessy: Me caías bien Luttrell, es decir, te causaban gracia mis chistes racistas (lo sé, me daba cuenta cuando sonreías y todo) no estabas mal y hasta te metiste al negocio. Pero como me suele pasar, me mostraste otra cosa de ti que sinceramente me decepcionó, ya sabes, comenzaste a comportarte como una más de esas niñitas estiradas y eso me cansó. Al final incluso te desligaste de mis negocios y bien sabe Dios que eso en esta tierra no se hace. Así que ya sabes, puede que me haya sentido lo suficientemente magnánimo como para no pedirte cuentas (eres mujer, y se entiende qe seas voluble y todas esas cosas), pero puede que un día me levante con ánimos de recordarte que con este tipo de negocios no se juega.


Amy: Me fue imposible no echarte el ojo con todo y esa estúpida camiseta del Arsenal que llevabas puesta, así que te abordé sin importarme una mierda (todo el mundo sabe que solo los niños y las mujeres le van al Arsenal, así que no hay problema). Igual te seguí el juego y nos gritamos de cosas y tal durante el juego, y eso mismo seguimos haciendo durante un tiempo.
Solo nos encontrábamos en los partidos, y en una de esas escapadas a comprar unas sodas te robé algún beso y tal. Para mi mala suerte, no se pudo pasar más de ahí y me quedé con la idea de que no eras más que una calienta huevos. Quedamos en medianamente malos términos con riesgo a una nueva tensión sexual, si te parece bien.

Mira Simón, contigo todo fue duro siempre. Nunca nos agradamos y ni siquiera nos esforzamos en hacer que algo fluyese bien, si convivimos fue apenas viéndonos y ni con un saludo por mucho que Frances fuese amiga tuya y hayan tenido su asuntito. Durante la guerra interactuamos más pero acabó y en eso acabó nuestra seudo tregua que nunca fue.

Luego de eso nos vimos hace como dos o tres años porque tuve una época dura con la coca y tú acabaste siendo mi dealer, fue como por seis meses hasta que ya decidí cortarlo y pues ahí sí me debes haber odiado más porque te había hecho un último pedido que ya no quise y pues obvio ni te quise pagar, ni modo que te pagase por algo que ni me iba a meter. Me dio miedo la verdad porque te pusiste como loco, no supe que le rompiste la madre al chico con el que creías que salía en el momento (ni era mi novio la verdad) y te acabó pagando por temor, hasta intereses le cobraste, pendejo.

Lo último que supe fue que lo habías amenazado y que te pagó, pero a las semanas alguien encontró su cuerpo en un río. Yo creo que tuviste que ver con eso, me dio mucho miedo la verdad, pero por orgullo hasta te saludé cuando nos vimos hace como dos meses en una calle. Esperaba no volver a verte, lamentablemente el destino te trajo hasta acá. Ojalá te boten pronto.

Nuestro trato es meramente superficial, porque cuando estábamos en Hogwarts era muchísimo más miedosa y delicadita que ahora, así que la fama que tenías no era una que me hiciera morirme de entusiasmo por conocerte. Algo de miedo me dabas, pero nunca te traté lo suficiente como para odiarte o que me aterrorizaras, lo que nos tocó convivir en clase y esas cosas. Creo que puedo decir que conmigo no fuiste tan patán, siendo niña inglesa y bien educada y eso. Peleamos juntos en la guerra, la verdad con todo lo de tu racismo y demás me hice la de la vista gorda porque ni mi problema era (ni amigos eramos ni nada) y habia cosas mas urgentes. Se que te casaste con Cherry y tuviste un niño y esas cosas de las que uno se entera siguiendo las conversaciones de los demás.